La capital ucraniana, Kiev, fue escenario de un devastador ataque aéreo ruso que dejó al menos tres personas muertas y nueve heridas, según informaron las autoridades locales. El alcalde Vitali Klitschko calificó el hecho como un “ataque masivo” que causó daños en al menos tres barrios de la ciudad.
El ataque involucró misiles que impactaron en edificios residenciales, oficinas y otros establecimientos civiles, provocando incendios y colapsos parciales de estructuras. En el distrito afectado, se reportaron daños significativos en viviendas y centros educativos, mientras los equipos de rescate trabajan para retirar escombros y atender a las víctimas.
“El impacto de este ataque ha sido devastador. Nuestra ciudad ha sido golpeada con gran fuerza y seguimos evaluando los daños y atendiendo a los afectados”, señaló Klitschko.
Las autoridades de defensa aérea confirmaron que varios misiles y drones fueron interceptados, aunque algunos lograron alcanzar sus objetivos. Las labores de rescate continúan, y se teme que haya más personas atrapadas entre los escombros.
Este ataque es uno de los más graves en Kiev en los últimos meses y ha generado condena internacional. Líderes de la Unión Europea y Estados Unidos han expresado su repudio y han anunciado nuevas medidas para presionar a Rusia.
Las autoridades ucranianas instaron a la población a permanecer en lugares seguros y seguir las indicaciones de los servicios de emergencia, mientras continúan las investigaciones sobre el alcance total de los daños y víctimas.