Lo que fue presentado con entusiasmo como una herramienta clave para fomentar el empleo juvenil en Chancay, hoy permanece con las puertas cerradas. El Centro de Empleo de Chancay, inaugurado en octubre de 2024 con presencia de la gobernadora regional Rosa Vásquez Cuadrado y el entonces ministro de Trabajo, Daniel Maurate, cesó sus funciones en junio pasado, tras apenas ocho meses de operación.
La expectativa generada por este proyecto, que prometía ser un puente entre los jóvenes y el mercado laboral, se ha desvanecido en medio de la falta de continuidad y problemas de gestión. Según se conoció, uno de los factores del cierre sería la deuda pendiente por el alquiler del local, hecho que habría motivado al propietario a no renovar el contrato, cansado según versiones extraoficiales de los constantes retrasos en los pagos.

Durante la ceremonia inaugural, uno de los rostros visibles fue Kristoffer Sánchez Villalobos, joven funcionario del Gobierno Regional, quien posaba para las fotos oficiales del evento. Hoy, con la oficina cerrada, queda en evidencia la necesidad de evaluar no solo las promesas, sino también los resultados concretos y la capacidad de gestión de quienes están al frente de estos proyectos.
Si bien desde el Gobierno Regional no se ha emitido una versión oficial sobre el cierre, lo cierto es que jóvenes que acudían en busca de orientación o una oportunidad laboral ya no encuentran atención, y se enfrentan nuevamente a la falta de apoyo institucional.
Este caso se suma a las crecientes críticas en la provincia por la desconexión entre las políticas públicas anunciadas y su implementación efectiva. Para muchos, se trata de otra muestra de cómo los anuncios, sin planificación ni sostenibilidad, terminan siendo promesas incumplidas.
